Mezcalero y mis amigos

Foto: twitter.com/Mezcalero_

Era viernes de puente y estaba triste. Tomé mi celular y escribí a mis amigos "Necesito alcohol. ¿Quién me acompaña?"

- Yo igual.

- Yo también.

- ¿Coyoacán?

- Nos vemos en la escuela y de ahí nos vamos.

Al Mezcalero ya había ido, pero no supe ni como se llamaba y hasta pensé que sólo era una extensión de La celestina (son muy parecidos), el bar de a lado que siempre está abarrotado. Coyoacán estaba vacío, pero los bares no. No quisimos buscar mucho: pasamos por El hijo del cuervo, La cervecería y La coyoacana, pero la espera parecía eterna. Decidimos ir a La celestina, pero el caso fue el mismo. Entonces recordé aquella "extensión" a 7 metros de distancia. 

Había gente parada afuera, pero sorprendentemente habían mesas disponibles. Un DJ al fondo mezclaba y la otra sorpresa fue que la música estaba en el volumen adecuado para la plática que mis dos amigos y yo tanto necesitábamos. Una sonrisa quedó dibujada en mi cara cuando vi la carta de mezcales: variados y a un precio razonable. El mesero siempre estuvo al pendiente y fue bastante amable, lo cual fue bueno y raro porque el buen servicio no es una de las principales características de los bares.

Platicamos y bebimos, y platicamos, y bebimos. Luego bebimos un poco más. Nos la pasamos tan bien que no nos percatamos de que nuestra cuenta se inflaba entre risa y risa. No importó. El buen rato y la borrachera ya nadie nos la quitaba. El Mezcalero se quedó con nuestro dinero, pero también con nuestro aprecio. 

Por cierto: los quiero, Memo e Ile. 

Foto: Facebook.com/MezcaleroCoyoacan

Mezcalero se encuentra en el número 14 de la calle Caballo Calco, en el centro de Coyoacán, a espaldas de la Parroquia de San Juan Bautista.

También pueden seguirlos en Twitter: @Mezcalero_ y Facebook.

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